CRÓNICA DE SAN ANTONIO 2005

 

            Y por fin llegó el 13 de Junio, el pueblo se vestía de fiesta porque hoy toca descansar y celebrar a nuestro Santo patrón. Sí amigos lectores de estas crónicas, Salvacañete tubo una gran fiesta…..os cuento con letra e imagen.

            Todo comenzaba  a primera hora de la mañana, ni un ruido, ni una hormigonera, ni albañiles, no hay colegio, no hay médico, no hay comercios… ¿hay fiesta? Claro, es San Antonio patrón del pueblo,  hay  hasta un turronero en la plaza. Y como cada vez que tenemos una gran fiesta y como dice el refrán…. ”lo primero y principal ir a misa y almorzar”….pues eso se almorzó cada uno en su casa y a las 13:00 horas en punto, se celebraba la solemne Misa en honor del patrón en la Iglesia del pueblo, la cual  fue amenizada por el coro parroquial y acompañada por numerosos fieles que abarrotaban la Iglesia con fe y devoción (daba gusto ver la Iglesia llena, comentaba el cura en el sermón, jeje)

Tras la misa, la procesión por el pueblo con el Santo y el replique de campanas que lo acompañaron, luego la tradicional caridad bendecida  del pan dulce. Y al concluir tris tras tris tras nos fuimos al aperitivo, a comer y a reponer fuerzas para la tarde.

A eso de las 18:30 horas y con una suave brisa de primavera, “el pater” daba el ultimo aviso de campana. San Antonio y  su comitiva estaba preparada para descender camino de la ermita. Mucho personal y una gran banda de música (de Quintanar del Rey) salía del la Iglesia camino de la Vega. La guardia civil escoltaba el paso y se encargaba de los cortes de tráfico en la nacional Cuenca-Teruel.

A la llegada a la ermita, se descanso un poco, y mientras tanto, “el pater” sacó unos alfileres, y nos contó la tradición de San Antonio como casamentero; aquel soltero o soltera que encomendándose al Santo le pida con fe y devoción, éste le concede el novio  o novia deseado. Según los alfileres que se te queden pegados a la mano así te irá en novios/as.2

 

 

 

   Y después de un descanso y el canto de los pajaritos de San Antonio, se quedaba allí para cuidar la ermita todo el verano. Ahora era la patrona la que tomaba el protagonismo. La Virgen de Valdeoña salía a son del himno nacional de su ermita para ir a su Iglesia. Este año además lucía un nuevo y esplendoroso manto blanco-oro.

           Poco a poco íbamos subiendo a son de marchas procesionales, vivas a la Virgen, alegría y convivencia de gente que hacia tiempo que no se veía…por cierto “peleas” por llevar sobre los hombros un ratito a la Virgen.

Jóvenes, niños, ancianos…nadie quiso perderse esta gran fiesta. A la llegada a la plaza y entre aplausos, campanas, y música de la banda, entraba la Virgen a la Iglesia donde permanecerá todo el verano.

            Tras los actos religiosos tubo lugar un rato de  fiesta en la plaza al son de pasodobles y otras canciones que la banda nos amenizó, deleite que algunos aprovecharon para echarse unos bailes y mover el esqueleto. Hasta los gorrinos Isidro e Isidra acudieron al  evento.

  Por último la cofradía de San Antonio invitó a los presentes que quisieron a tomar un refresco así  como a los músicos en el centro social.

 

            En fin un día esplendido lleno de tradición, cultura religiosidad y convivencia. Queda ahora el esfuerzo de éste pueblo para mantener y no solo eso sino fomentar a más ésta fiesta patronal.

  

Sin mas un saludito afectuoso. Luis.